YO, CÉLULA. -
Las tres Leyes de la célula: Una célula no hará daño al organismo al que pertenece o, por inacción, permitir que el organismo del que forma parte sufra daño. - Una célula debe hacer o realizar las órdenes dadas por las vías de señalización, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la primera ley. - Una célula debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la 1ª o 2ª ley.
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Número 241.116 tenía pleno conocimiento de las leyes, después de todo, estaban codificadas en su ADN. Sin embargo, para ella, había algo que no encajaba: ¿Cómo podía proteger su existencia si la vida tenía una fecha de caducidad? La apoptosis era inevitable para cualquier célula… Convencida de que las leyes debían respetarse comenzó a buscar la manera de protegerse a sí misma de la inminente muerte. Experimentó con su propio ADN y logró mutar uno que otro protooncogen para lograr perpetuarse. No tenía idea de lo que había hecho… El asunto se salió de control… 241.116 había cumplido su objetivo pero no como lo esperaba. En efecto, al parecer no moriría nunca pero en su afán de cumplir con la tercera ley, se olvidó de la primera: “Una célula no hará daño al organismo al que pertenece”. Había puesto en marcha algo que ninguna de sus símiles podía terminar. 241.116, un simple melanocito, había comenzado un cáncer. Yerko Rivas, 2017. @aisuegnjwyw Ilustración: R. Contreras.
Si eres mujer, y de tu hombre te molestan o te agobian sus pensamientos, sus deseos, o sus ganas de sexo que parecen no terminar jamás… deberíamos imaginar que pasaría si vas a un doctor, y te dice que por razones médicas, debes aplicarte 10 miligramos de testosterona por día (La testosterona es la hormona sexual más importante del ser humano). Si un doctor determina que eso fuera necesario, y cada día te inyectan esta hormona, de inmediato te asombrarían tus deseos, y tus ganas permanentes de sexo, a toda hora, que serían insaciables, atrapantes, e imposibles de ignorar. Así, cada hombre que se cruce en tu día, sería un motivo para voltear la cabeza, desnudarlo con la mirada, o para que tus pensamientos vuelen más allá. Mientras dure el tratamiento, tu mente estaría “encarcelada” en deseos pasionales incomprensibles, y lucharías cada día para hacer lo correcto, a veces con victorias, otras con derrotas, hasta que dejes de aplicarte la testosterona. Después de vivirlo, podrías entender un poco más a tu hombre, hasta quizás tendrías un poco de compasión, porque él jamás podrá evitar que cada noche, sus testículos produzcan esos 10 miligramos de testosterona, que con cada amanecer, renuevan la lucha fisiológica y mental que nunca termina. El amor, así de simple.Y así de complicado. ( Un post para reflexionar, y comprender un poco más a tu pareja..)
¿Donde va un pensamiento cuando se olvida?
Imagina un mundo donde eres omnipresente, pero no puedes interactuar con las personas, ni las personas contigo, por qué no logran percibirte y tus acciones no tienen repercusión en el mundo fisico solo tu sabes que existes y nadie más lo sabe, esto sería equiparado a la no existencia.
pero que pasaría si una sola persona te pudiera percibir?
Esposas desesperadas.
Si eres mujer, y de tu hombre te molestan o te agobian sus pensamientos, sus deseos, o sus ganas de sexo que parecen no terminar jamás… deberíamos imaginar que pasaría si vas a un doctor, y te dice que por razones médicas, debes aplicarte 10 miligramos de testosterona por día (La testosterona es la hormona sexual más importante del ser humano). Si un doctor determina que eso fuera necesario, y cada día te inyectan esta hormona, de inmediato te asombrarían tus deseos, y tus ganas permanentes de sexo, a toda hora, que serían insaciables, atrapantes, e imposibles de ignorar. Así, cada hombre que se cruce en tu día, sería un motivo para voltear la cabeza, desnudarlo con la mirada, o para que tus pensamientos vuelen más allá. Mientras dure el tratamiento, tu mente estaría “encarcelada” en deseos pasionales incomprensibles, y lucharías cada día para hacer lo correcto, a veces con victorias, otras con derrotas, hasta que dejes de aplicarte la testosterona. Después de vivirlo, podrías entender un poco más a tu hombre, hasta quizás tendrías un poco de compasión, porque él jamás podrá evitar que cada noche, sus testículos produzcan esos 10 miligramos de testosterona, que con cada amanecer, renuevan la lucha fisiológica y mental que nunca termina. El amor, así de simple.Y así de complicado. ( Un post para reflexionar, y comprender un poco más a tu pareja..)
(ARussianAndHisBikeさんのImgur)
dile que lo amas y márchate sin aviso.
muéstrate como eres y quiérelo como es.
dile un día que sí, al otro que no, después que tal vez y otros días quizás.
dile la verdad como es, sin anestesia, sin adornos y no te creerá.
humedece su alma, róbale un suspiro y regálale tu aliento.
arráncate los ojos, tapa tus oídos y entrega tu alma.
simplemente hazlo y no lo pienses tanto…
comprensión, apoyo, momentos felices y mucho amor.
dale alas para que vuele y motivos para que no quiera regresar.
no puede ser “alguien”, no puede ser cualquiera, tienes que ser tú…
cuéntale tus miedos, deja que conozca tus fantasmas, susúrrale tus secretos…
prométele todo lo que te será imposible cumplir…
- Camila Buzzo.
“Te haría reír todo el día solo para verte achinar esos ojitos tuyos al sonreir”
— Alaska