Hola Extraño:

Hola extraño:

Es curioso que te vuelva a escribir, pero es viernes de nueva cuenta y está lloviendo. La nostalgia apareció de repente y sentí que era el momento adecuado para darte líneas. Te he tenido abandonado, te pido una disculpa, los días últimamente me sonríen y sabes que cuando eso pasa las letras se me estancan.

Te cuento que he vuelto a los días con sonrisas verdaderas, que he vuelto a usar el espejo sin el temor de odiarme, que ahora puedo pasar por los puentes más altos sin encontrarle tantas fallas a sus barreras de protección e incluso puedo esperar en el anden del metro sin imaginar cosas garrafales. Que tonto suena todo lo anterior, pero lo cierto es que sucedía más de la cuenta.

Decidí volverme prioridad, volver a ser yo y anteponerme por sobretodo. Si, dejé de hablarle a mucha gente, dejé de responder los mensajes o estar para las personas y sus problemas. Es difícil en ocasiones sobresalir y sentirse bien, hay días buenos y otros no tantos, pero por lo menos ahora el llanto me dura una o dos horas y no toda la noche, además que es por mis hormonas y no porque alguien más me lo provoque.

Por otro lado mi cabeza es un caos, no es raro de decir, por un lado está está linda coincidencia que la vida me ha dado y tambien están los pensamientos controladores que me atormentan de vez en cuando, pero he aprendido a controlarlos y sobrellevarlo.

Hace unos días estuve con el Sr. P , y me dió un beso en la mejilla. Sé que para cualquier persona podría ser algo común e incluso super bobo, pero te puedo contar que para mí fue una acción maravillosa que me alegró el alma como pocas veces lo ha hecho algo. Desearía ser más expresiva a veces, pero se me da muy poco y siento que podría llegar a ser fastidiosa si lo dejo salir en al momento, realmente me da un poco de miedo sacar ese lado y que le asuste o peor aún, que esas muestras sean rechazadas como muchas veces sucedió en el pasado.

Duermo por mi cuenta, sin pastillas aunque aún están en ese frasco por los días malos.

Volví al ejercicio y de nueva cuenta fui al médico, ví a personas que hace mucho no mantenía contacto y es reconfortante saber que uno es extrañable y querido.

El acosador volvió, con esta van tres veces en el año. A veces me gustaría platicar con él y saber qué fue lo que hice para que vuelva tantas veces. Pero sé de lo que es capaz y más allá de mi curiosidad, mi seguridad es más importante y realmente no quiero que me suceda nada ni provocarlo así que volví a desaparecer de su alcance.

Mis días se pasan tan rápido pero en cada uno de ellos algo se aprende o es recordado. El Sr. P sigue presente en cada día, te podría decir que más allá de la increíble persona que es, le he tomado un cariño invaluable, pocas personas me pueden llegar a tocar el alma o moverme sentimientos, darme confianza y hacerme sentir a gusto con lo que sucede en mi vida. Él es una lucesita que no quiero que se funda, somos muy opuestos, bastante la verdad, pero en su persona existe algo tan mágico que me hace quererlo y dejarlo entrar en recuerdos muy íntimos. Me gusta que me cuente sus cosas, su vida y adoro caminar con él. Adoro verlo reír y escucharlo en sus momentos más reflexivos, pero más que todo que me tenga confianza en decirme cosas graciosas o emblemáticas para él y poder ser yo junto a él sin que le incomode mi silencio o mis momentos tristes.

Había pasado tiempo sin escribirte y era por la simple razón que ya no te recordaba, ni te habías hecho presente, de cierta forma lo agradezco. No te digo adiós pero espero no volver a sentirte en mucho tiempo. He estado feliz y de mejor humor sin ti en mi vida.

Gracias por existir y demostrarme que solo eres un momento fugaz del cual puedo salir. Esta es la última carta que te escribo, al menos en esta cuenta, de sobra se sabe que si algo vuelve a colapsar aquí dentro, esta historia y esta chica cósmica desaparecerá. Por ahora, he de irme a juntar nuevas letras que expresen lo que siento y las tristezas de las que tanto me gusta disfrutar.

Hasta pronto, extraño.

Siempre tuya, L